Hoy 20 de junio celebramos el Día mundial de las personas refugiadas. Este año al drama de unas vidas rotas por salir de su país de origen se suma la situación de millones de personas atrapadas en los campos de refugiados, en las fronteras sin medios para hacer frente a la pandemia.
Desde EDE Fundazioa, y especialmente desde la Residencia Mañarikua, colaboramos para mejorar la calidad de vida de estas personas, ofreciéndoles cercanía, atención y cariño.